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Aitana, repartidora a domicilio en la cámara oculta - El Hormiguero

El disco sale mañana...

Sale ya en unas horas, una hora y media solamente.

Claro, son las diez y treinta y dos...
en una hora y veintiocho minutos.

¡Qué nervios, por Dios!

Pero ya hay fans que lo tienen porque se lo has llevado tú a casa.

No os perdáis lo que viene a continuación,
Aitana ha tenido la amabilidad de participar con nosotros en una cámara oculta donde hace de repartidora a domicilio.

Entonces los fans no sabían nada, los fans sabían que un repartidor les iba a dar una pizza gratis si se dejaban grabar con cámaras.

El resultado es este.

Vale.

Adelante.

Hola.

Llamo. Llamo ya. Silencio.

Hola.

Hola.

Hola.

Vengo a entregarte una pizza.

A ver si es lo que habías pedido.

¿Puedes comprobarlo, por favor?

Gracias.

Es que...no sé si era la pizza o si...o si preferías el disco, no lo sé.

Vengo a traer una pizza.

¿La queréis gratis?

Y no sé...¿yo te la doy gratis si me respondes un cuestionario, puede ser?

Y no sé...

Vale...¿sí?

¿Quién es tu cantante favorita?

Eh...pues...Aitana...

¿Tú eres Cayetana, no?

Sí.

Bueno, pues...yo es que soy Aitana...

¿Has pedido una pizza?

Sí.

¿Puedes comprobar si es esta, por favor?

Ah, claro.

Es que...sí, es que...como justo lo voy a sacar, pues he venido a traértelo.

¡Ay, no!

¿Quién es?

Pizza.

¿Has pedido pizza?

¿Has pedido pizza?

¡Aitana!

Pero, ¿puedo pasar o no?

Aitana, ¿qué haces aquí?

Tengo una Nancy de ti.

Y ella esta es del pelo largo, la nueva, la que ya me está creciendo el pelo ya.

Papá, que ha aparecido Aitana en mi casa.

¡Adiós, Aitana!

¡Adiós, chicas!

Me voy a seguir repartiendo.

Esta mujer maravillosa es Aitana.

Es que os lo agradezco, gracias, gracias.

No sabes lo que os lo agradezco porque en realidad yo nunca había ido a casa de una fan.

En realidad yo nunca había estado como en casa de alguien que me siguiese y ver un póster de mi cara en ninguna habitación,
ni los discos, ni nada.

O sea, que fue como la primera vez que yo experimentaba algo así tan cercano.

Y fue brutal conocerlas y desde aquí pues les mando besos porque no pudieron ser más monas y me encantó pasar un rato con ellas y de verdad que gracias por el regalo que me hicisteis.